Zuccardi, reconocimiento y presentación en Japón
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Leer másUn poco de historia:
Luigino, vino de Italia a los 12 años, en 1957, junto a sus 7 hermanos, de un pueblito cerca de Nápoles. Aquí en Argentina aprendió el oficio, y trabajaba en la panadería de su papá Michelle llamada “La Sublime”. Luego perfeccionó su formación como confitero junto al maravilloso escuadrón de 33 obreros en la confitería del Jockey Club.
Siguiendo la tradición de su padre; inauguró su propia panadería junto a su esposa Ana, y sus dos hijos Claudio y Pablo. “La Galette”, hace 41 años.
La disciplina y el respeto son clave en su escuela, y es lo que le permitió expandir su negocio.
Su legado fue: trabajo, dedicación, excelencia y amor por lo que se hace.
En 2009, Claudio y Pablo, los herederos de Luigino, tomaron el timón de la renovación tanto estética como de producción de la panadería haciendo hervir esa pasión tana que les recorre el cuerpo. Sucesores del legado de sus padres, laburantes a sol y sombra, llevan marcado a fuego el compromiso y la excelencia.
La idea de lo artesanal y los principios de Luigino están gravados en todo el negocio. Por eso, a pesar de las sucesivas crisis del país, siguen trabajando con las mejores materias primas.
Esta marca registrada tiene un peso enorme entre quienes los eligen cada día, por su calidad y calidez.
El Pan Dulce de La Galette:
El producto estrella de la Galette es su Pan Dulce.
La receta fue traída de Italia. Hecho de forma totalmente artesanal y perfeccionada año tras año. El Pan Dulce de La Galette es húmedo, se cuidan mucho los procesos de elaboración.
El proceso comienza 5 meses antes de la fecha de las fiestas, eligiendo y seleccionando la materia prima. Se le da a cada pieza, el tiempo de levado y cocción diferente, de acuerdo al peso e ingredientes de la misma. Esta elaborado con muchos frutos secos y frutas. También tenemos la variedad con chispas de chocolate, y sin frutas.
También influye en el resultado final, el envasado.
Se arman grupos de trabajo que cuidan hasta el más mínimo detalle.
No se puede comparar con ningún Pan Dulce comercial. Ya que respeta todo el proceso natural, es hecho completamente a mano, cuidando cada detalle, y sobre todas las cosas hecho con mucho amor y dedicación, como dice Luisino.
Aunque la fecha de las fiestas es la temporada alta del Pan Dulce, lo elaboramos todo el año.