Un verdadero inventario gintonero argentino. Así puede definirse a Viva el Gin, el nuevo sitio lanzado por el especialista rosarino Matías Jurisich.

La Web reúne todo lo producido en el país en cuando a gines, ginebras y tónicas. Ya hay más de 50 etiquetas de gin y cuatro marcas de tónicas artesanales, más algunas ginebras.

El boom gintonero que estamos atravesando sigue avanzando y Jurisich aprovechó este parate de cuarentena para darle las puntadas finales a un proyecto que tenía iniciado desde hace algún tiempo.

Al visitar Viva el Gin, encontramos un amplio listado de bebidas fabricadas íntegramente en Argentina con los botánicos usados para su producción, con lo cual se puede saber de qué se trata el producto. Incluso hay un link a las redes de cada fabricante en caso de querer preguntarle algo.

El propio Jurisich explica que “hace tiempo comenzó un movimiento muy interesante de productores artesanales de gin. Tato Giovannoni dio el puntapié inicial con Príncipe de los Apóstoles y a raíz de ese primer gin, y también del de Simón Bonsembiante, que fue el segundo que sacó un gin artesanal (James Deakin), comenzaron a elaborarse muchos gines a nivel país, todos ellos buscando una fórmula con botánicos cercanos que se diferencien entre sí”.

“A raíz de este empuje, sobre todo de la mano de un montón de productores que salieron a comunicar cómo hacer los gines, como los hermanos Moretti con Buenos Aires Gin, que hacían cursos de destilados, o como Tomi Jaime con Heredero, que recorría el país con su producto, muchos más empezaron a hacer los suyos”, detalla.

En medio de este contexto fundacional, se generó mucha información, pero cuando el producto llegaba al consumidor final común y corriente, empezó a surgir la pregunta de en qué se diferenciaba uno de otro. Y para eso se creó Viva el Gin, para mostrar toda la producción argentina de gin, que ahora también incluye algunas ginebras clásicas y las aguas tónicas que se están elaborando. El objetivo es que todo producto que sea producido en Argentina, tanto artesanal como industrial, esté incluido.

El trabajo encabezado por Jurisich fue sin duda de hormiga, ya que fueron entrevistados todos los destiladores que fabrican cada producto.

En cuanto a la explosión que está atravesando este trago, el creador de Viva el Gin fundamenta que se debe a que “no sólo es simple -- porque incluye solamente gin y agua tónica -- sino que también cada gin es diferente y cada tónica también puede tener un perfil diferente. De un solo trago se pueden ver distintos perfiles y acaparar muchos sabores, entonces es simple de comprender el boom. En Argentina estuvimos muy atados a consumos que tenían que ser de una determinada marca, como el fernet, las gaseosas, los aperitivos o el vermut con soda. Pero esto que sucede tiene que ver con una atomización del mercado que se está dando en todos los aspectos. En el gin en particular, sucede porque la gente ya identifica qué quiere en un gin: más cítrico, más especiado, más herbáceo, con más sabor a enebro, etc. Y lo mismo con la tónica”.

Finalmente, hace una interesante comparación: “como ya estamos acostumbrado por el tema de los vinos a que una cepa puede darnos diferentes perfiles de sabor, en el mundo del gin pasa lo mismo: dos marcas de gin que tengan botánicos similares, pueden ser diferentes, porque cada uno busca un camino distinto”.