El mercado español recibió recientemente al licor Malavita, una especie de competidor para el Aperol Spritz que viene desde Italia y que tiene un background relacionado a la música under y la clandestinidad.

El medio español El Economista entrevistó a Belén Aguirre, Marketing Manager de Malavita, y estas son las respuestas más destacadas:

¿Por qué se decidieron por este licor italiano?

Hay productos que son, en sí mismos, un flechazo. Y Malavita entra dentro de ese reducido y selecto grupo. Toda la historia que gira alrededor de este licor de almendras, su clandestinidad, su producción limitada y su historia nos dejaron fascinados, por eso apostamos firmemente por rescatar esa receta ancestral para que no cayera en el olvido y que el mundo pudiera disfrutarla.

¿Están notando un aumento del consumo de los destilados u otras bebidas alcohólicas para tomar durante el día y sin mezclar?

Para tomar durante el día sí. También estamos viendo un ligero aumento de aquellas con una menor graduación, precisamente asociado al consumo de día. Sin mezclar no hay una tendencia clara, de hecho, el consumo se ha sofisticado mucho en los últimos años, también de la mano de nuevos mixers, y cada vez vemos una hostelería que ofrece mayor variedad de cócteles o combinados.

¿Apostar por una propuesta con la marca Italia es más seguro para el éxito?

Apostar por lo auténtico y la calidad en la selección de materias primas es garantía de éxito. Sin duda, Italia es reconocida como el gran productor de amaretto a nivel mundial y esto imprime un aporte adicional en sus credenciales, pero el éxito o no deberá ser declarado por el público, que es en quien hemos pensado al apostar por Malavita.

¿Esta bebida es famosa en Italia?

Malavita es originario de Bérgamo y hubo un tiempo en el que adquirió una gran fama a nivel local entre el público más alternativo, ya que alrededor de él se creó toda una leyenda urbana de clandestinidad. Los Malavita Social Club eran un grupo de amigos que soñaban con trascender en el mundo de la música y, en un garaje donde ensayaban, encontraron una receta ancestral de un licor hecho a base de almendras. Sus conciertos empezaron a ser populares, a los que la gente acudía no tanto por la música, sino por probar ese licor del que todo el mundo hablaba. La receta de Malavita ha sido rescatada por Grupo Varma para introducir en nuestro país este amaretto casi clandestino y de toques inconformistas, perfecto para aquellos que rompen con lo convencional.

¿Cuál es el público objetivo de este licor?

Por su origen y perfil de sabor, el perfil que más atraído se puede sentir por Malavita es la generación Z y los Millennials, para disfrutarlo tanto de noche como en el famoso tardeo que ahora está tan de moda.

¿Cómo se ha planteado la campaña de marketing?

En un primer paso estamos apostando por el canal hostelería, haciendo que los profesionales del sector sean quienes conocen de primera mano el producto, lo aprecien y puedan recomendárselo a sus clientes. La calidad del líquido de Malavita es tan excepcional que la acogida que estamos recibiendo es muy positiva. Más adelante, y en función de cómo evolucione la incertidumbre que nos rodea en la situación actual, iremos ampliando nuestro foco de comunicación a otras audiencias

Con información y foto de El Economista.