Durante el año pasado, el mercado de Estados Unidos tuvo un crecimiento del 69% en la facturación y de un 47% en el consumo de vinos en lata. Con ese dato en mente, tres bodegas argentinas anunciaron que lanzarán antes del cierre de 2019 sus variedades en dicho formato de 335 centímetros cúbicos.

La decisión también va de la mano con la crisis que viene atravesando la industria (de la mano con la crisis a nivel nacional): en 2018 se bebieron apenas 18,7 litros de vino per cápita.

Las bodegas que buscarán quitarle clientela a la cerveza con vinos dulces, frescos y de bajo nivel de alcohol son Familia Zuccardi, Bianchi y Grupo Peñaflor.

La primera de ellas lo hará a través de Santa Julia Chenin Dulce Natural. Esta bodega vende desde comienzos de año tres variedades enlatadas en el mercado de Estados Unidos y aseguran que al proponer la idea en redes sociales obtuvieron buenas respuestas. El vino elegido tendrá una gradación alcohólica de 7,5º.

Bianchi se meterá en el mundo de las latas con el histórico New Age (se vende desde 1995). Este vino dulce y gasificado tendrá 9º de alcohol.

Finalmente, Peñaflor tendrá dos opciones con el nuevo formato: Fincas Las Moras y Frizzé.

Uno de los problemas que encontrarán estas tres marcas, y todas aquellas que se lancen a la nueva propuesta, es que las bodegas no tienen líneas de llenado para este tipo de envase y además la lata, a diferencia de la botella, tiene fecha de vencimiento.