Colosso Wines, Sottano y un dream team de espumantes
Se vienen las fiestas y, para despedir este año difícil, nada mejor que un vino con burbujas
Leer másSantiago Mayorga: “Esperamos vinos de muy buen color y concentración de fruta, linda condensación aromática y de buena acidez natural”.En plena vendimia y en un año especial, los expertos de Nieto Senetiner nos cuentan cómo viene la vendimia de este año.
Santiago Mayorga, enólogo de Bodega Nieto Senetiner, asegura que la vendimia 2023 le permitirá a Nieto Senetiner poder elaborar vinos con el estilo de siempre: intensos, frescos, de linda concentración y acidez, balanceados. Esta es una muy buena noticia, ya que esta vendimia se caracterizó por algunas dificultades climáticas. “Será una cosecha 2023 de poca uva por heladas tardías en la primavera y por varias tormentas graniceras, pero de muy buena calidad. Al haber menos uva, se está notando un adelanto de la madurez y venimos cosechando entre 2 a 3 semanas más anticipado con respecto al año pasado”, afirma Jimena Castañeda, ingeniera agrónoma de Bodega Nieto Senetiner.
Asimismo, en línea con la experta en viñedos, Mayorga dice: “lo que creemos es que como ha sido una cosecha muy anticipada y de menor rendimiento, vamos a terminar más temprano que lo habitual. Calculamos que los primeros días de abril ya no debería quedar casi nada de uva en la calle, todo depende por supuesto de la capacidad de recepción de las bodegas y los avances de la madurez de la temporada. La expectativa que tenemos, por como viene todo hasta el momento, es que va a ser una cosecha de uva muy sana”.
Santiago Mayorga cuenta que ya se terminó con las bases de espumantes y blancos, y con los tintos llevan un gran avance: entre el 70 y el 80% de lo planeado.
Como característica sobresaliente de esta cosecha, Castañeda relata: “Notamos alta acidez y altos alcoholes potenciales. Por haber racimos bastante heterogéneos en el viñedo, tendremos que tener mucha atención con los puntos de cosecha”.
Mayorga coincide: “Nos hace acordar a la cosecha 2020, justo en el comienzo de la pandemia, también hubo un efecto de heladas tardías que produjo un cuaje muy deficiente y una anticipación de la cosecha. Lo que sí este año estamos viendo alcoholes un poco más altos y acidez más elevada. Con lo cual tenemos que encontrar el punto correcto de madurez. El desafío en estos años donde hay menos uva es que el alcohol no sea tan elevado. Estamos día a día analizando las regiones y las zonas, porque cada una tiene su particularidad, pero esperamos vinos de muy buen color y concentración de fruta, de linda condensación aromática y de buena acidez natural con niveles interesantes de ácido málico”.