Estamos viviendo una verdadera revolución de vinos blancos en Argentina, impulsada en gran parte por la exploración profunda de nuestros lugares. Aunque nuestro país ha sido históricamente asociado a los vinos tintos, en los últimos años viene demostrando que es posible elaborar blancos de alta gama, con una identidad propia y muy marcada.
Hace más de 20 años, una familia de viñateros de La Consulta plantó un viñedo que llegó a nuestras manos en 2008. Desde el principio encontramos en él un sello indeleble, que lo asemejaba a los viñedos más antiguos de la zona. Hileras de membrilleros rodean la viña—algo muy tradicional en los viñedos del Valle de Uco—le marcan su identidad única.
Con el objetivo de seguir poniendo en valor la rica historia de la zona, el tipo de suelo y el clima de Finca Los Membrillos, nos entusiasmaron a plantar nuestras primeras cepas de Semillon. Al estudiar la historia del Valle de Uco, se observa que el Malbec y el Semillon fueron históricamente las variedades más plantadas, y que muchos viticultores incluían Semillon dentro de sus fincas de Malbec. Por eso, cuando llegamos a esta finca tan llena de tradición, no tuvimos dudas: este era el lugar ideal para nuestro Semillon.
El Semillon disfruta del oxígeno y la crianza, por lo que decidimos fermentarlo en barricas y foudres usados. Su crianza se extendió durante dos años en esas mismas vasijas.
Desde su primera aparición, con la cosecha 2019, este vino ha recibido destacados reconocimientos de la crítica internacional.