Siempre que hablamos de ron, la mente se nos va inmediatamente a Cuba y en menor medida a República Dominicana y Venezuela. Pero seguramente pocos sepan que durante décadas -- y siglos -- la costa de la provincia española de Granada fue una gran productora de esta bebida gracias a sus grandes cultivos de caña de azúcar y su clima ideal.

La historia dice que los moros introdujeron este producto en la península ibérica y hasta que Cristóbal Colón trajo a nuestras tierras el producto terminado a través del Atlántico.

Pero la época dorada del ron español llegó a su fin en 2006, cuando la Unión Europea decidió que la caña no era un cultivo rentable para la región. Así, ese año se realizó la última zafra en la ciudad de Motril.

Tras una década de abandono de esta actividad, en 2017 la UE volvió a liberar el mercado azucarero en el continente y los campos de Motril quedaron en condiciones de volver a tener plantaciones de caña. Como consecuencia, 26 emprendedores de distintos rubros (banqueros, empresarios, comunicadores, comerciantes) crearon Ron Agrícola del Sur de España.

El producto terminado de la marca es Occidens, un ron que se destila en Álava con la caña cosechada en Motril. Si bien en España es todavía un producto poco conocido, ya está haciendo mella en el mercado francés. Este ron agrícola, a diferencia de los centro y sudamericanos, es más vegetal, florido y afrutado.

Además, Occidens tiene un toque salino que, aseguran los expertos, tiene que ver con la cercanía de las plantaciones al mar Mediterráneo. Lógicamente, al tratarse de un producto surgido de la cosecha de un solo lugar, por ahora sólo se han envasado 3.000 botellas numeradas. Pero las expectativas son altísimas.

Con información de Gastroactitud