La gastronomía argentina estuvo exaltada en la última semana a partir de una noticia histórica: por primera vez un chef nacido en estas tierras fue condecorado con tres estrellas Michelin.
El platense Mauro Colagreco, radicado en Francia desde 2001, había sido el primer argentino en sumar una estrella de las que otorga La Guía Michelin tanto a restaurantes como a hoteles en el año 2007; cinco años más tarde conseguiría otra y a comienzos de 2019 logró la tercera.
En los tres casos las obtuvo gracias a Mirazur, un establecimiento que es mucho más que un restaurante y que está ubicado en el poblado francés de Menton, un paraíso de la Costa Azul. Mirazur tiene todas sus ventanas con vista al Mar Mediterráneo. Está abierto desde 2006 en una casona de tres pisos de mediados del siglo XX y se ubica en un cerro.
Colagreco, luego de abandonar la carrera de ciencias económicas para meterse de lleno en la gastronomía, decidió probar suerte en Francia prácticamente sin contactos ni dinero y sin hablar el idioma, con lo cual le costó mucho meterse en escuelas de cocina. Aún en nuestro país había estudiado con el Gato Dumas y Beatriz Chomnalez, quien le dio la idea de saltar a Europa. Una vez superados los problemas iniciales en el Viejo Continente, terminaría trabajando con Alain Ducasse, Bernard Loiseau y Alain Passard, el trío de chefs más destacado del país.
Seis meses después de abrir su restaurante propio, la Guía Gault&Millau lo eligió Revelación del año y en 2009 Cocinero del Año. En el medio, logró que Mirazur ingrese al top 100 de los mejores restaurantes del mundo, posición que fue mejorando hasta ubicarse 3º en los “World’s 50 Best Restaurants”.
Además de todos estos premios y los muchos más que obtuvo con Mirazur, Colagreco tiene el orgullo de contar con una cocina muy particular que cataloga como “creativa, libre y respetuosa” y que cuenta con productos frescos de mar, montaña y frutas y verduras cultivadas en su propia huerta. Como destacado, en el restaurante no hay carta: se crean platos en base a la mercadería obtenida cada día.
Su equipo, además de chefs, cuenta con antropólogos, jardineros, artistas y escritores, base fundamental para lograr la calidad de sus productos. Los precios de este peculiar lugar oscilan entre los €160 y los €260.
Además de Mirazur, Colagreco es dueño de Azur en Beijing, Grill 58° en Macao, Le Siècle en Nanjing, Grandcoeur en Paris, BFire en Courchevel, Le Majestic Bfire en Canne, Carne en La Plata y L'Estivale en Nice.
Fuente: vinomanos.com