Los espumantes, vinos espumosos o champagnes se presentan en diversas formas y tamaños. Aunque una botella estándar contiene 750 ml , es probable que te hayas cruzado con una botella magnum, de 1,5 litros. Pero incluso este tamaño puede parecer modesto en comparación con los formatos que superan los 30 litros. En la cima de esta escala, se encontraba el descomunal recipiente conocido como Melquisedec, capaz de albergar el equivalente a 40 botellas de burbujas, es decir, 240 copas de vino en total. Durante años, esta botella colosal ha reinado indiscutiblemente como el monarca absoluto de la carrera espacial del vino espumoso. Pero hoy, todo eso cambia.

Sin embargo, ha llegado el momento de dar la bienvenida a un nuevo campeón: el enólogo francés Luc Belaire acaba de anunciar el lanzamiento de Zeus. 

Esta titánica botella asumirá ahora el título de "La botella de burbujas más grande del mundo", con una asombrosa capacidad de 45 litros de líquido.

¿Pero qué tan grande es exactamente? El simple acto de verter su contenido requiere la ayuda de tres adultos, y cuando está llena, pesa nada menos que 72,5 kilos.

Diseñar esta maravilla de ingeniería no fue tarea fácil. No sucedió de la noche a la mañana. Según la marca, se invirtieron siete años en la construcción de esta botella, contando con la colaboración de ingenieros aeroespaciales. 

¿La razón? Esta obra maestra está fabricada con acero de alta tecnología en lugar de vidrio. Su diseño aísla la botella de las temperaturas y presiones extremas, impidiendo que las aproximadamente 3 mil millones de burbujas contenidas en su interior escapen involuntariamente.

"El Belaire Zeus es un testimonio de nuestra búsqueda constante de innovación", según afirma Brett Berish, CEO de Sovereign Brands, la empresa matriz de la bodega. "Esta monumental botella de 45 litros ha sido diseñada para brindar experiencias extraordinarias a nuestros seguidores".

Pero esta creación va más allá de ser una simple novedad. Los conocedores de vino suelen preferir las botellas magnum en lugar de las de tamaño estándar, ya que el mayor tamaño implica que proporcionalmente menos líquido queda expuesto al aire dentro de la botella. Esto reduce la oxidación y permite que un Zeus madure en la bodega durante décadas. Sin embargo, lamentablemente, solo un par de afortunados clientes tendrán la oportunidad de poner a prueba esta teoría. 

Se han producido únicamente dos botellas en total. Una está llena del distintivo Rare Rosé de Belaire y la otra contiene un demi-sec. Ambos líquidos son extremadamente populares en los Estados Unidos. No obstante, es importante destacar que no se les puede llamar "champagnes", ya que provienen de la bodega de la marca, ubicada en el corazón de Borgoña. 

Según Berish, se espera que estos gigantes burbujeantes realicen una gira mundial antes de su lanzamiento comercial a finales de año. Hasta el momento, el precio por botella aún no ha sido revelado.

FUENTE: TR.NET