Desde hace algunos años, las bodegas y la industria vitivinícola en general tienen una prioridad a la que le dan muchísima importancia: la identificación de terruños. Esto es, los lugares con las mejores condiciones tanto del suelo como del clima y el agua para sembrar y cosechar sus uvas.
En este contexto, se llegó a un punto en el que se volvió necesario conseguir aprobaciones para las nuevas indicaciones geográficas delimitadas. Y en Mendoza, tierra de vinos por excelencia en Argentina, la última zona aprobada fue Los Chacayes, a fines de 2017.
Este terroir despertó el interés de muchos y ya hay varias bodegas allí instaladas que producen Chardonnays, Malbecs y Cabernet Francs, entre otras variedades. Los Chacayes está al pie de la Cordillera de los Andes y hasta ahora se la había considerado parte de Vista Flores. Su superficie total es de 102.500 hectáreas (desde el distrito Los Chacayes hasta el límite con Chile), de las cuales unas 1.600 son cultivables a alturas de entre 1.000 y 1.350 metros. El Arroyo Grande es la principal fuente de agua de la región.
Los suelos de la zona, aseguran los investigadores que testearon el área, tienen buena permeabilidad y le permiten una perfecta madurez a las vides. El clima de la zona cuenta con escasas lluvias.
En Los Chacayes ya se ubican las bodegas Piedra Negra, Giménez Riili, Súper Uco, Alpasión, La Coste de Los Andes, Corazón del Sol, Casa de Uco y Enzo Bianchi. Algunos de los vinos más destacados de los producidos en la zona son: Casa de Uco El Salvaje Orgánico Malbec 2016 (94 puntos), Chacayes de Piedra Negra 2014 (93,5), Vivo o Muerto El Manzano 2015 (94) y Jackot Gran Lurton Friulano 2017 (92), entre muchísimos otros.
Con información de Vinomanos